Con las etiquetas “#70milhoesnao” (70 millones no) y “#FicaLH” (quédate Luis Henrique), los hinchas del Fluminense publicaron mensajes en las redes sociales para cuestionar la salida por un “precio bajo” de una de las nuevas revelaciones del fútbol brasileño.
La protesta coincidió con la salida de 2.000 socios del club, aunque el Fluminense aclaró que fue por morosidad de sus mensualidades y no como represalia por la venta del jugador, anunciada el domingo en rueda de prensa por el presidente del club, Mario Bittencourt.
Luiz Henrique, que tenía contrato hasta 2025 con el Fluminense, es considerado uno de los principales activos patrimoniales del club de Río de Janeiro, que cumple una destacada campaña esta temporada.
Según Bittencourt, se llegó a un acuerdo con el club español y se firmó un precontrato en el que el Betis desembolsará 13 millones de euros (unos 14,2 millones de dólares) por el 85 % de los derechos deportivos del delantero de 21 años.
"Sé que las personas están discutiendo con comparativos de jugadores 'A 'y 'B'. Existen ventas mejores y existen ventas peores, pero cualquier venta depende del valor del mercado y de la necesidad de quien está vendiendo y nosotros necesitábamos vender desde el fin de año", declaró Bittencourt.
El dirigente confirmó que Luiz Henrique permanecerá en el club entrenado por el experimentado técnico Abel Braga hasta mitad de año, cuando se inicie la nueva temporada en Europa y deba viajar a Sevilla.
El delantero es uno de los artífices de la exitosa campaña del "Flu" en este inicio de 2022, en el que el equipo acumuló una secuencia de 12 victorias seguidas y estuvo a una de igualar el centenario récord de 1919, cuando encadenó 13 triunfos seguidos.
La secuencia fue en la Copa Libertadores, en la que avanzó a la fase de grupos, y en el Campeonato Carioca, el torneo regional del estado de Río de Janeiro en el que es líder invicto después del empate el domingo 0-0 ante el Boavista, pero empleó un equipo de reservas.