El cambio en la cúpula del Bayern Munich fue adelantado por la renuncia de Karlheinz Rummenigge como presidente del Consejo Directivo. El campeón alemán debía modificar el puesto el 31 de diciembre, pero el club comunicó que anticipará seis meses y tomará el mando el exjugador Oliver Kahn. “Es el momento más lógico desde el punto de vista estratégico”, expresó el exdelantero en un comunicado publicado por los bávaros.
“Empezamos el nuevo año fiscal y el equipo es asumido por un nuevo entrenador. La nueva temporada debe hacerse bajo la responsabilidad de Oliver Kahn como nuevo CEO, por el bien de los responsables y por el bien del FC Bayern”, añadió Rummenigge, quien defendió los colores del Bayern como jugador durante diez años y asumió como directivo en 1991: hasta 2002 fue vicepresidente y posteriormente ascendió a la presidencia del Consejo Directivo, el cargo de CEO.
Herbert Hainer agradeció el trabajo de Rummenigge y señaló que era alguien que, desde los tiempos de jugador, dejó una huella en la institución. “Para mí y para todos fue una gran alegría haber trabajado con Karlheinz Rummenigge. Cuando la pandemia lo permita le haremos una despedida adecuada”, comentó el presidente del Bayern. Desde la asunción de Rummenigge, los de Munich conquistaron dos Champions League (2013 y 2020), catorce Bundesliga y diez Copa de Alemania.
Además, el club bávaro aumentó la facturación de 176 millones a 679 millones de euros anuales y tuvo beneficios en todos los años fiscales lo que, según la página del Bayern, aseguró la estabilidad financiera. Por su parte, Kahn, el reemplazante, formaba parte del Consejo Directivo y tuvo una especie de ciclo de aprendizaje. “Tras su exitosa carrera como jugador y sus experiencias como empresario ha trabajo intensivamente en la cúpula del Bayern”, apuntó Hainer sobre el exportero.