Los incidentes comenzaron por la tarde y duraron una decena de minutos, en una de las orillas del Vieux-Port, en la que se encuentran varios pubs británicos. Varios aficionados fueron detenidos y los comerciantes del lugar recibieron la instrucción de cerrar sus puertas y recoger sus terrazas.
El sábado se disputa en Marsella el Inglaterra-Rusia, de la primera jornada del grupo B de la Eurocopa de fútbol, considerado como partido de “alto riesgo” por las autoridades, debido a problemas en el pasado con los “hooligans” de ambas selecciones.
Los policías “separaron a grupos de ingleses y de rusos”, declaró a la AFP el prefecto de policía, Laurent Nuñez, subrayando que no hubo ningún incidente de gravedad.
La mayoría de los aficionados estaban ebrios y sin camiseta, mientras que en el suelo se amontonaban latas y trozos de cristal de vasos y botellas.
En la noche del jueves al viernes ya se habían producido incidentes violentos, con un grupo de 250 aficionados británicos lanzando latas y otros objetos a la policía.
Esos primeros incidentes se saldaron con siete heridos leves -tres aficionados, dos policías municipales y dos miembros de la policía nacional-.
Un francés de 30 años fue detenido en la noche del jueves al viernes como sospechoso de haber robado una camiseta de la selección de Inglaterra. Será objeto de un juicio rápido el sábado.
Otra persona había sido detenida esa noche, un británico de 24 años que quedó poco después en libertad sin cargos.
“Estamos realmente decepcionados por estas escenas de desorden en Marsella ayer por la noche y condenamos esos comportamientos”, lamentó la Federación Inglesa (FA) este viernes en un comunicado.