“Si tuviera diez o quince años menos, pensaría en una partida al extranjero”, dijo, cuando se le preguntó si pensaba eventualmente entrenar a otro club europeo, en una jornada dedicada a los medios de comunicación en el club bávaro.
Cuando se disputa este fin de semana la última jornada del campeonato alemán, ganado ya por su equipo, el partido del sábado, que le opone al Borussia Mönchengladbach (su ciudad natal y el club en el que destacó como jugador y donde debutó como entrenador), “será el último partido en Bundesliga para mí como técnico”, declaró.
“Prefiero esperar las dos finales para decir lo que viene después”, dijo respecto a sus proyectos de futuro.
El Bayern Múnich debe disputar primero el 25 de mayo la final de la Liga de Campeones en Wembley contra el Borussia Dortmund y una semana más tarde la de la Copa de Alemania contra Stuttgart.
Un programa que le podría permitir lograr un triplete histórico.