La defensa del jugador del Flamengo contó con el auxilio de tres momias halladas en la cordillera de los Andes en 1999 para probar que la sustancia puede permanecer en el cuerpo de una persona durante años, e incluso siglos, según confirmó el letrado Bichara Neto al portal de noticias UOL. “Eso ayudó a componer los argumentos de la defensa. Por sí solo no sería decisivo, pero sumado a otras pruebas fue valioso”, aseguró Bichara Neto.
La defensa, con ayuda de un arqueólogo, se apoyó en diversos estudios que demostraron que el metabolito benzoilecgonina había permanecido en las momias a pesar del paso de los siglos, de acuerdo con O Estado de Sao Paulo.
De acuerdo con el diario, en una de las momias se detectó en el pelo una cantidad importante de benzoilecgonina, la misma sustancia encontrada en Guerrero, lo que indica que ingirió hoja de coca unos quinientos años atrás.
El Comité de Apelaciones de la FIFA redujo este mes la sanción impuesta a Guerrero, de un año, a seis meses, con lo cual el jugador podrá disputar el Mundial de Rusia 2018.