Cazorla, que se entrena con el Villarreal para tratar de recuperarse de sus graves lesiones en el tobillo, participó en el último cuarto de hora de primer partido amistoso del Villarreal de pretemporada.
“Es difícil expresar lo que se siente después de tanto tiempo fuera de los terrenos de juego. Volver a sentirte futbolista es muy especial. Sentir ese cariño de la gente y el recibimiento que me ha dado. Sólo por eso merece la pena el sufrimiento de este tiempo”, dijo en declaraciones facilitadas por el Villarreal.
“Siempre he estado en contacto con el club desde que me fui -en 2011- y al corriente de la actualidad del equipo a través de gente de la directiva y jugadores. Ojalá pueda compensarles este trato volviendo a jugar”, añadió Cazorla.
“Realmente no se puede pagar ni recompensar lo que ha hecho por mí el Villarreal. No solo cuando llegué con 18 años, sobre todo por el detalle de abrirme las puertas tras dos años parado y darme facilidades, calma y sin presión en el día a día. Eso solo me lo puede dar el Villarreal”, añadió el asturiano.
“Realmente era impensable volver jugar un partido como el de ayer y no sé disfrutarlo. Soy muy exigente y quiero mejorar cada día, pero quisiera saber dónde estoy y disfrutarlo”, declaró Cazorla.