Poco después de que se llegara al minuto 25 del segundo tiempo del partido entre Rosario Central y River Plate por la segunda fecha del Torneo Final del fútbol argentino, el encuentro tuvo que ser detenido por varios minutos.
Es que un perro había ingresado al campo de juego del Gigante de Arroyito. Al parecer, su intención era formar parte del encuentro.
El animal no solo consiguió que el partido se detuviera sino que también se robó el espectáculo. En medio del enojo del arquero “canalla”, Mauricio Caranta, el perro decidió dejar un recuerdo en el área.
El perro se detuvo a realizar sus necesidades ante la risa de los hinchas.
Desde las gradas se escuchaba un “ole, ole”, cada vez que el cuarto árbitro y el encargado de seguridad trataban de detener al canino, pero éste los esquivaba cual hábil delantero a la defensa rival.
Tras varios intentos, finalmente fue un jugador de Central el que consiguió detener al perro para que lo terminaran sacando.