Un gol del noruego Joshua King, tras un pase de Ryan Fraser en el minuto 88, supuso el descenso matemático del Sunderland, poniendo fin a una década en la máxima categoría.
El descenso supone un nuevo fracaso para su técnico David Moyes, que cayó en desgracia desde que salió del Everton en 2013 para hacerse cargo del Mánchester United que dejó el legendario Alex Ferguson. Tras no dejar huella en los Red Devils, pasó sin pena ni gloria por la Real Sociedad.
“Estoy muy decepcionado. Lo siento por los aficionados, que ponen su corazón y su dinero en el equipo, mis pensamientos son principalmente para los hinchas”, señaló el técnico británico.
“No hay que buscar culpables individuales, es un tema colectivo de arriba a abajo, los clubes son mucho más fuertes que los individuos”, añadió sin aclarar si seguiría en el puesto la próxima temporada.
Moyes llegó a los Black Cats en julio, sustituyendo a Sam Allardyce, tras un año en el que equipo salvó la categoría por un estrecho margen. Esta temporada siempre se movió por la parte de baja de la clasificación, estando en zona de descenso desde el 10 de septiembre.
“La clasificación nunca miente. Nuestras actuaciones y nuestros resultados son los que evidentemente nos han llevado a esta situación”, dijo el capitán John O’Shea.
También en la lucha por no perder la categoría, el Hull (17º) igualó sin goles ante el Southampton (9º), mismo resultado que cosecharon el Stoke (12º) y el West Ham (14º).
En el otro partido disputado este sábado, el vigente campeón Leicester (11º) ganó 1-0 en la cancha del West Bromwich (8º) gracias al ariete internacional inglés Jamie Vardy (43), que aprovechó un pase del japonés Shinji Okazaki para marcar su 15º tanto este curso.