Nadie habría apostado por que el campeón de Oceanía estuviese entre los cuatro mejores del Mundial de Clubes. Es un equipo semiprofesional cuyo presupuesto no alcanza ni el millón de euros y al que un técnico español, Ramón Tribulietx, ha invitado a soñar apostando por el toque y cambiando su mentalidad sobre el fútbol.
Su nombre se ha dado conocer en el mundo del fútbol cuando aún ni ha cumplido diez años de existencia. Después de imponerse a los anfitriones, el Moghreb Tetuán, en el lanzamiento de penaltis tras finalizar el tiempo reglamentario y la prórroga sin goles, y al ES Sétif de Argelia (1-0) gracias a un tanto del defensa Irving (1-0), busca el más difícil todavía al medir fuerzas con el San Lorenzo.
Con un esquema 4-1-4-1, por encima de su rigor táctico ha mostrado el gusto por querer jugar la pelota y su fuerza defensiva. No ha encajado aún un gol un equipo que hasta la fecha acumulaba cuatro eliminaciones en octavos de final en sus cinco participaciones anteriores en esta competición. Con su presencia en semifinales, ya ha hecho historia.
Ahora afronta el más difícil todavía al medirse a un equipo de Argentina, un país donde el fútbol es una religión. El San Lorenzo afronta el reto de conquistar el mundo tras saborear la primera Copa Libertadores de su historia. De nada sirve pensar ya en el sexto puesto en el campeonato que acaba de conquistar el Racing Club de Avellaneda.
“Llegamos muy bien pero sin tirar manteca al techo”, destacó el centrocampista Néstor Ortigoza.
Con el objetivo marcado de ser campeón y retar al Real Madrid, el San Lorenzo inicia su camino en las semifinales del Mundial de Clubes en un duelo en el que es señalado como clarísimo favorito.
El 'Ciclón', dirigido por Edgardo “El Patón” Bauza, que ya disputó esta competición como técnico del Liga de Quito en 2008, llega impulsado por sus últimos buenos resultados y tras recuperar a uno de sus jugadores referencia, Leandro Romagnoli, quien, restablecido de una luxación de codo que sufrió el pasado mes de octubre, esperará en el banquillo el momento de volver a brillar. Bauza tenía una duda que ha despejado en su último entrenamiento.
Finalmente apostará por el colombiano Mario Yepes como pareja en el centro de la defensa de Walter Kannemann, y Mauro Cetto será suplente. Los dos arrastraban molestias físicas, Yepes en el tobillo izquierdo y Cetto, en el gemelo izquierdo.
El San Lorenzo afronta el reto de ser el primer equipo argentino en inscribir su nombre de campeón en el torneo. El Boca Juniors en 2007 y el Estudiantes en 2009 se quedaron a las puertas de la gloria.
Al estreno, el 'Ciclón' llega mostrando su malestar a la FIFA por cambiar la sede de la semifinal que debía jugarse en Rabat. Al trasladarse a Marraquech provoca que su partido se juegue en un césped que desgastarán el Real Madrid y el Cruz Azul, y que la final sea el cuarto partido que alberga el mismo estadio en cinco días.
San Lorenzo: Sebastián Torrico; Julio Buffarini, Yepes, Walter Kannemann, Emmanuel Más; Néstor Ortigoza, Juan Mercier, Enzo Kalinski; Gonzalo Verón, Pablo Barrientos; y Martín Cauteruccio.
Auckland City: Williams; Berlanga, Irving, Dordevic, Takuya Iwata; Vicelich, Bilen, De Vries, Payne, Tade; y Tavano.
Árbitro: Benjamin Williams (Australia).
Estadio: Le Grand Stade de Marraquech.
Hora: 19:30 hora local (16:30 de Paraguay).