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Cerro Porteño recibía en Barrio Obrero al Deportes Tolima en su último partido en la edición 2013 de la Copa Libertadores de América.
El Ciclón, ya eliminado con cinco derrotas consecutivas, esperaba sumar para evitar terminar con el casillero en blanco su participación en el torneo continental. El equipo colombiano, por su parte, necesitaba de una victoria para sellar su pase a octavos de final.
Ambos equipos protagonizaron un interesante duelo de fuerzas desde que arrancó el encuentro. El equipo paraguayo, compuesto en gran parte por sus habituales suplentes, consiguió contener al “Pijao” para generar algunas llegadas de peligro sobre el arco protegido por el paraguayo Antony Silva.
En el minuto 9, Roberto Nanni la primera de las muchas oportunidades de gol que se le presentarían en la noche. El delantero argentino remató al arco pero Silva reaccionó bien y contuvo el disparo.
Algunos minutos después, los colombianos también tendrían su oportunidad de abrir el marcador. Otálvaro buscó el arco con un remate que fue bien desviado por Pablo Gavilán.
Los dos rivales siguieron buscando el arco rival, siendo el Ciclón el que consiguió demostrar mayor superioridad ante un rival consciente de la necesidad de una victoria para evitar correr la misma suerte que el azulgrana.
Pese a los varios intentos de uno y otro bando, la primera etapa llegó a su final con un empate sin goles impuesto en el marcador.
En la complementaria, fue el Ciclón el que arrancó más punzante, más vertical.
En el minuto 59, un pase en profundidad encontró a Nanni encarando solo a Silva. El argentino definió bien, venciendo al portero, pero el balón terminó perdiéndose cerca del poste del arco rival.
Tres minutos después, Beltrán tuvo la posibilidad de abrir el marcador pero pateó fuerte y arriba. Cerro seguía avisando.
Los del “Pijao” no podían conformarse pues su compatriota, el Independiente Santa Fe, le estaba dando una mano al derrotar al Real Garcilaso, resultado que ayudaba a sus intenciones. En el minuto 65, Gonzalo Viera se encargó de salvar la caída de su arco.
Cuando faltaban nueve minutos para el final del encuentro, un remate contra el palo de Gavilán parecía ser el gol que le valiera la clasificación al Tolima.
A tres del final, Iván Torres ganó el balón, encaró, levantó la mirada y sacó un potente zapatazo que fue desviado por Silva. Poco después, un ataque colombiano terminó con el balón “lamiendo” el poste.
Al final, el empate se impuso en Barrio Obrero. El Ciclón demostró más actitud en el campo de juego, a diferencia de los partidos anteriores, consiguió un punto “por el honor” y dejó una buena imagen ante su gente. Además, condenó al Tolima a quedar fuera de la Copa Libertadores.