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Admirable ritmo intenso de los equipos en el arranque del lance, ambos estuvieron a la altura de las expectativas y salieron a buscar el gol sin ningún preconcepto.
Cerro Porteño parecía estar mejor asentado en los primeros minutos, con un prematuro tiro libre de Alan Rodríguez que despejó Martín Silva. Pero con el correr del partido, el nerviosismo y la descoordinación se apoderaron del equipo de Francisco Arce y se dieron múltiples “regalos” a la delantera de Libertad.
El “Guma” mostraba una gran solidez defensiva y poco a poco fue creciendo en ofensiva. Ya sobre 25′, Libertad era muy superior y ya había generado jugadas para abrir el marcador, principalmente con Roque Santa Cruz como activo principal en el área.
Para colmo de males para el local, Arce tuvo que realizar una variante obligada en apenas 30′, con la salida de un lesionado Carlos Rolón y el ingreso de Enzo Giménez.
Sobre el final del primer tiempo, Cerro Porteño tuvo su pico más alto de ocasiones y la alternativa fue el remate de media distancia en dos ocasiones consecutivas, con Federico Carrizo y Juan Patiño, pero atento estaba Silva para garantizar la estabilidad de los de Tuyucuá.
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Apenas comenzado el segundo tiempo, Libertad ya inquietó con un disparo de Lorenzo Melgarejo que forzó la gran intervención de Jean Fernandes. Sin embargo, después de ese breve suceso, el partido entró en un bucle de intrascendencia y los dos equipos le pusieron un freno a su ímpetu.
Fernando Ovelar mejoró levemente las insinuaciones de Cerro Porteño, pero la puntada final siguió siendo la gran cuota pendiente; esto último se aplicaba a los dos equipos.
Cerro no dio señales de claridad en ofensiva en todo el partido y cuando ya parecía inevitable el empate, Enzo Giménez levantó un centro que Daniel Bocanegra conecta y la manda en su propia puerta, a los 82 minutos. Un gol fuera de contexto y de otro partido, pero gol al fin.
El azulgrana sostuvo las múltiples cargas aéreas de Libertad en los minutos finales y consolidó una victoria sufrida, que sirve de envión anímico en uno de los torneos más parejos de los últimos tiempos. El Ciclón vuelve a ganar después de cuatro partidos e iguala la línea de Nacional (18), ambos en el segundo lugar, a un punto del líder Olimpia.