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Cerro Porteño pasó de la exhibición futbolística en la goleada 4-0 contra Libertad a una pobre imagen ante Tacuary, que derrotó al Ciclón por 2-0 y evitó que los dirigidos por Francisco Arce aprovechen la oportunidad de escalar a la cima del torneo Apertura y liderar el certamen solitario. “No estuvimos a la altura del partido para tomar la punta”, comenzó el técnico.
“Normalmente cuando se juega mal y el rival hace un buen trabajo, plantea bien, cierra espacios, se pierde. No lo merecimos, ellos merecieron ganar el partido”, continuó Arce con relación al Tacua, que venía de perder dos partidos consecutivos. Por su parte, el Azulgrana, que el domingo visita a Sportivo Ameliano, rompió la racha de seis juegos sin derrotas.
“No me gustó nada porque perdimos en los rebotes, estuvimos muy distantes para trabajar y forzar jugadas y estuvimos abiertos. Cambiamos de sistema a los dos o tres minutos y ni con eso acortamos distancias para predominar cuando teníamos el balón, especialmente cuando ellos tenían porque contra atacan muy rápido a espaldas de los laterales”, puntualizó el entrenador.
Arce reveló que trató de corregir durante el entretiempo, pero que el equipo siguió jugando mal. “Enfocamos corregir eso en el primer tiempo, insistimos, continuamos queriendo forzar el juego por el medio. Ellos habían hecho un planteo muy bueno en ese sentido para lograr espacios por el medio y cerrar los costados. Nosotros nunca pudimos resolver”, señaló.
“Hago mea culpa. Tanto repetir y no corregir, la culpa es mía. Ellos son los que hacen, pero la culpa es mía. Vamos a buscarle vueltas, vamos a repeticiones, si hay que cambiar, hay que cambiar, en distintos aspectos, para que vuelva a su formar normal. No puede ser, es muy evidente la diferencia entre un gran rendimiento a otro bastante pobre”, culminó el paraguaríense.