“Con trabajo y orden podemos hacer un equipo competitivo, tenemos los jugadores y dos semanas de trabajo por delante”, dijo el estratega al referirse al descanso de la liga el próximo fin de semana por la fecha FIFA. El Veracruz de Cardozo cayó ayer 2-0 ante los Rojinegros del Atlas que en su casa en Guadalajara se recuperó de un primer tiempo con dominio del rival y resultó superior en los finales para imponerse con par de goles del argentino Milton Caraglio. Con el resultado, los 'escualos' aparecen en el duodécimo lugar y bajaron al último de la tabla de cocientes que determinará el equipo que descenderá el próximo mes de mayo. En esa clasificación, que computa los resultados de los últimos cuatro torneos más el Apertura 2017 y el Clausura 2018, Veracruz suma 87 unidades en 79 partidos y está dos puntos abajo de Atlas y Querétaro, que tienen un encuentro más. “A mí no me preocupa Atlas ni nadie, me interesa el Veracruz, si nosotros sumamos puntos, vamos a involucrar a otros en el tema del descenso”, comentó Cardozo, quien reconoció la necesidad de que los Tiburones mejoren el orden defensivo y sean más creativos de tres cuartos de cancha hacia adelante.
En la decimotercera jornada del campeonato, el Veracruz visitará el 13 de octubre a los Xolos de Tijuana y nueve días más tarde tendrá su primer partido en casa desde la llegada de Cardozo, frente a las Chivas de Guadalajara. “Cuando un equipo pierde, el vestuario no está de la mejor manera pero hay que seguir trabajando para corregir los errores y ser más competitivos”, insistió el paraguayo, uno de los más grandes goleadores que ha pasado por el fútbol mexicano. Según el estratega, ha tenido poco tiempo para trabajar con sus jugadores porque fue contratado apenas a inicios de semana y ahora con mayor margen de tiempo, espera insistir en el aspecto físico y luego en los aspectos finos del juego para levantar al equipo.