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Deportivo Capiatá era uno de los equipos paraguayos que más complicada tenía la situación para intentar su clasificación a la fase de octavos de final, es que había conseguido un empate en su estadio.
El equipo de Héctor Marecos no traicionó su esencia y fue a Caracas a buscar con la misma alineación del mismo once que puso en el primer juego con la ausencia lógica de Tobías Vargas, por expulsión. Antonio Franco ocupó ese lugar.
Como se da siempre en los torneos internacionales, el equipo local fue el que comenzó a presionar en busca de llegar hasta el arquero Franco. A Capiatá tardó en acomodarse dentro del terreno de juego y apeló a la buena presencia de sus mediocampistas y centrales para aguantar a los venezolanos, principalmente, a través de Otero y Curé.
Poco a poco el cuadro de Marecos fue encontrando el fútbol, López y Escobar comenzaron a ser importantes así como Oscar Ruiz y Carlos Ruiz Peralta. A los 26 minutos se produjo una buena jugada por izquierda, los defensores venezolanos no pudieron sacar y el balón quedó a merced de Ruiz Peralta que de un remate rastrero anotó el primer gol de Capiatá, el gol que necesitaba el equipo paraguayo para forzar a los caraqueños a convertir dos para poder clasificar.
Caracas salió con todo, fue a buscar con más ímpetu que fútbol llegar al empate y hasta pidieron penal en una jugada en la que el balón pegó en la espalda de un defensor.
Al inicio del segundo tiempo, Deportivo Capiatá, que siguió jugando al fútbol llegó a marcar el segundo gol. El gol que prácticamente sentenciaba la llave. Fue una jugada por izquierda de López, el balón llegó a Ruiz Peralta que con golpe de cabeza anotó el tanto capiateño.
Cuando los paraguayos ya comenzamos a saborear el partido ante Boca Juniors por octavos de final, Caracas y Flores nos dijeron esperen un rato, todavía no hay nada definido, es que el venezolano sacó un gran remate que se convirtió en el descuento y en la pequeña luz de esperanza para los locales.
El Deportivo Capiatá siguió presionando, jugando de la misma forma, como si fuera que lo estaba haciendo en su estadio y en una jugada de ataque, el balón le llegó a Oscar Ruiz que esta vez sí pudo cumplir y depositó el balón en el arco de Baroja para el tercero de Capiatá, ya era muy difícil para el cuadro local levantar esa desventaja.
De allí en más solo fueron intentos vanos de Caracas en tratar de marcar de goles y quedaba a expensas de algún contragolpe de Capiatá que podía ampliar la diferencia si era más preciso.
Gran victoria del cuadro paraguayo que se convierte en el tercero de nuestro país en colocarse en los octavos de final de la Copa Sudamericana, fase donde recibirá a uno de los equipos más grandes del continente, Boca Juniors de Argentina.