Lippi anunció que abandonaría el puesto tras ganar con el Guangzhou el cuarto campeonato chino consecutivo el domingo, confirmando a su vez que su sucesor sería su expupilo en la selección italiana.
A los 66 años, Lippi quiere pasar más tiempo con su familia en Italia, pero seguirá teniendo el mando técnico del equipo solo que desde la grada en lugar de en el campo, explicó en una conferencia de prensa.
Cannavaro, de 41 años, se hará cargo del equipo en el día a día con el título de “entrenador ejecutivo”, según lo ha denominado Lippi.
El ex defensa internacional de Parma, Inter Milán, Juventus y Real Madrid ganó del Balón de Oro y el premio al Mejor Jugador del Año en 2006, tras la ganar como capitán de Italia el Mundial de Alemania.
Antes de aterrizar en el Guangzhou, Cannavaro formaba parte del cuadro técnico del Al-Ahli de Dubái.