El Bayern dominó desde el comienzo, controlando la pelota, poniéndola en la mitad contraria y generando una serie de llegadas claras ya en los primeros minutos, pero fallando a la hora de definir.
Franck Ribery tuvo las dos primeras ocasiones en el minuto 2 y en el minuto 5, Toni Kroos generó la tercera en el minuto 10 con un remate desde fuera del área y más tarde Arjen Robben, Bastian Schweinsteiger y Thomas Müller también encendieron las alarmas del equipo inglés.
A ratos parecía que el Bayern se adornaba demasiado en su propio dominio y que tendía a hacer un toque de más antes de entrar al área lo que hizo que el gol, que parecía cuestión de tiempo, no llegara en el primer tiempo.
El City, si se hace excepción de un remate desde fuera del área de Jovatic en el minuto 32, sólo logró sacudirse del dominio del Bayern después del minuto 40, cuando Alvaro Negredo tuvo dos buenas ocasiones de cabeza, en el 44 y el 45.
En la segunda parte, el dominio del Bayern amainó y el City se mostró con más frecuencia adelante, con ocasiones de Nasri, en el 48, y Negredo, en el 55 con un cabezazo a quemarropa al cuerpo de Manuel Neuer.
Negredo fue el encargado de abrir el marcador para el City, en un contragolpe, en el 61, tras recibir un pase de profundidad, ganarle la carrera a Javi Martínez y superar a Neuer dándole la vuelta a lo que se había visto durante buena parte del partido.
Sin embargo, la ventaja del City no duró mucho y el empate llegó cinco minutos más tarde, cuando Thomas Müller convirtió un penalti que se produjo por una mano de Zabaleta, cuando disputaba un balón con Mario Mandzukic.
En el 73 el Bayern logró el segundo con un remate de cabeza de Mandzukic, aprovechando un centro lanzado desde la derecha por el suizo Xerdhan Shaqiri.
A dos minutos para la conclusión Dzeko pudo igualar el partido, pero Neuer le adivinó el intención y despejó su disparo a córner.