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En este compromiso jugado en el estadio Banorte, los Dorados lograron el 1-0 hasta el minuto 90+1, cuando el paraguayo Cristian Báez remató dentro del área chica un balón rebotado por el portero.
Al 90+4, el ecuatoriano Vinicio Angulo salió de entre dos defensores tras un cambio de ritmo y se coló al área felina para hacer el 2-0 con un remate sutil ante la salida del guardameta.
Tras este dramático desenlace, que significó romper una racha de dos derrotas al hilo -una en liga y otra en copa- Maradona se fundió en un abrazo con su auxiliar Luis Islas y gritó el triunfo con los brazos abiertos.
Con esta victoria, segunda con Maradona al frente, los Dorados llegaron a nueve puntos y rebasaron a los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara, que se quedaron con ocho unidades.