“Alemania va a ser perseguida como nunca. Tendremos que desplegar fuerzas sobrehumanas si queremos ser de nuevo campeones del mundo”, afirmó Löw, en declaraciones a la radio pública de Baviera.
El Mundial arrancará para la “Mannschaft” el 17 de junio, en Moscú, donde se enfrentará a México. El seleccionador espera que el arquero y capitán, Manuel Neuer, logre ponerse plenamente en forma y confía, asimismo, en poder contar con Marco Reus, quien ha estado apartado de la selección por lesiones.
Asimismo, son piezas fundamentales para la selección Toni Kroos y Mats Hummels, a la espera de que se consoliden en el conjunto algunas de las recientes incorporaciones de Löw, como Timo Werner, Leroy Sané y Joshua Kimmich. De la combinación entre los considerados puntales de la selección -incluido Jérôme Boateng- y los más jóvenes debe salir el conjunto que lleve a Alemania a defender título. En los próximos meses deberá desarrollarse “una inmensa hambre de título”, advierte Löw, "ya que siendo campeones vigentes, somos quienes más tenemos que perder frente a los muchos rivales que aspiran a quitárnoslo", sea Brasil, Francia, España, Inglaterra o Argentina.