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Óscar Romero y Roberto Junior Fernández tuvieron la enorme satisfacción de levantar la preciada Copa, que a partir de este año también ya lleva inscripto el nombre del Fogão y es uno de los que participará del Mundial de Clubes 2025.
Junior Fernández lleva ocho temporadas en filas del equipo carioca, tiene el privilegio de portar el brazalete, aunque en esta última parte perdió la posición con John.
Desde 2017 está vinculado Roberto con el Fogão, al que llegó después de jugar en Vitória (2014-2015) y Fluminense (2016) y en ese lapso pasó de todo en su foja, sufrió lesiones graves que lo apartaron de las canchas, descenso del equipo, inconvenientes apremiantes de orden financiero y su primera Copa Libertadores con este club en el año que arribo quedaron eliminados en cuartos de final ante Gremio.
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A su vez, Óscar llegó este año al Botafogo, que también acaricia el Brasileirão. “Disfrutando de este momento, ganando este título que uno soñaba desde chico. Realmente una emoción muy grande, uno recuerda cuando de niño prendía el televisor y veía la Copa Libertadores y quería estar del otro lado. Hoy me toca estar ahí”, enfatizó en la nota con Bolavip Argentina.