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Después de su derrota por goleada en el superclásico, Cerro Porteño recibía a Tacuary con la idea de ganar y seguir sumando en las fechas finales del Clausura. Tacuary llegaba con sus urgencias porque ganó Sol de América ganó y lo dejaba en el último lugar del acumulativo.
Carlos Jara Saguier introdujo siete cambios en el equipo titular con relación al último partido. Cerro desde el inicio fue a buscar el gol y tuvo dos ocasiones en los pies de Gabriel Aguayo en donde se pudo adelantar, pero en el primero sacó Samudio y en el segundo, el delantero erró por muy poco.
A los 8 minutos salió mal Marcos Cáceres, Sergio Araujo se llevó la pelota, entregó a Piris de Motta que remató bien, Bareiro rebotó y allí apareció Fernando Fernández para anotar el primero del Ciclón.
Fueron minutos en los que a Tacuary le vino mal el gol y Cerro tenía la ocasión de aprovechar para aumentar el marcador, pero eso no ocurrió. Pasaron algunos minutos donde Tacuary llegó con cierto riesgo hasta el arco de Jean Fernandes. Bareiro, el arquero de Tacuary, fue una de los mejores del partido.
Néstor Camacho y Nicolás Morínigo ingresaron en Tacuary en el segundo tiempo y eso hizo que Tacuary saliera más y llegue con peligro hasta Jean Fernandes. Cerro Porteño no jugó de la misma forma y jugó con sus vicios de siempre y sin alma en la cancha.
Llegaba mucho más Tacuary, Feliciano Brizuela se perdió el empate con un remate al travesaño. Pero después, Diego Fernández ya no falló y anotó el empate para Tacuary.
A partir de ahí parecía que si Tacuary se proponía iba a ganar el partido ante un Cerro Porteño que realizó cuatro cambios de una y sacó a jugadores como Gabriel Aguayo que estaba siendo lo mejor en un pobre Cerro.
El partido se fue con el empate que no le sirve a ninguno de los equipos y un Cerro Porteño sin alma que se fue abucheado por sus hinchas