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La tarea de contención fue impecable
Los minutos de estudio, que por lo general suelen ser breves, esta vez se extendieron más de la cuenta. Para Paraguay, el solo hecho de mantener el arco en cero ya era ganancia, por la calidad del rival y la incomodidad por la altitud.
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Con la zaga reforzada con línea de cinco, el juego estuvo controlado, salvo algunas aceleraciones con las que parecía podía moverse la estantería defensiva. Pero como los avances locales no fueron constante, era cuestión de respirar, recuperar energía y mantener el orden.
La Albirroja tuvo la ocasión más clara de conquista en la primera etapa. Saque manual de Cáceres, “peinada” de Arce para el empalme de Enciso, cuyo envío fue bloqueado por Galíndez.
Al descanso, con buenas sensaciones. Los datos estadísticos marcaban el 74 por ciento de posesión del balón de los incómodos locales, que no tuvieron espacio para el juego ofensivo que suelen desplegar en Quito.
En la complementaria se dieron algunas turbulencias que no pasaron a mayores. Las variantes introducidas por Alfaron permitieron oxigenar el elenco que fue sintiendo el desgaste porque no solo se dedicó a defender, también salió a la medida de sus posibilidades.
Una acción de gol prometedora para nuestra escuadra se dio mediante una pelota capturada por Cubas en tres cuartos de campo. El dinámico volante central no se animó a definir desde buena posición y su pase al ya cansado Enciso no contó con la precisión necesaria.
La solidaridad fue un factor clave para respaldar al atento Gatito Fernández, que sacó un tiro que tuvo mayor complicación al ser desviado por un compañero.
La igualdad es altamente positiva, aunque dio la sensación que si Paraguay se animaba, podía haber logrado algo más, porque además de maniatar a Ecuador, tuvo algunas cargas que no tuvieron buena resolución. Valió la pena el esfuerzo.
Gustavo Alfaro: “El orden táctico fue fundamental”
El técnico argentino Gustavo Alfaro, que condujo ayer su tercer partido en el banco de la Albirroja en estas Eliminatorias Sudamericanas, enfatizó sobre el orden táctico del equipo para conseguir el valioso resultado en Quito.
“Fue un partido de mucho riesgo. No solo nos enfrentamos a una muy buena selección, que es la de Ecuador, sino también a la complejidad de la altura. Y más allá de que vinimos tres o cuatro días antes, solo pudimos hacer tres entrenamientos en el estadio Atahualpa; para que los jugadores puedan ver la velocidad de la pelota, la manera de golpearla y que se habitúen a jugar en la altura, pero eso no alcanza”, indicó Alfaro en conferencia de prensa.
“Dividimos el partido en etapas y sabíamos que los primeros 30 minutos íbamos a sufrir, porque había que sostener la pelota. No podíamos permitir que nos lancen centros. Nos faltó precisión en la altura, pero sacamos un buen resultado”, remató el argentino que tendrá en frente al conjunto venezolano en casa, el martes.
Roberto Fernández: “Contento por el esfuerzo del equipo”
El arquero de la selección paraguaya, Roberto Fernández, se mostró muy satisfecho al término del partido que se disputó ayer frente a Ecuador, en la altura de Quito, y entre otras cosas expresó:
“Primeramente, agradecer a Dios por este punto que conseguimos en un lugar en el cual es muy difícil de jugar; por la altura y la velocidad de la pelota. Estoy muy contento por el esfuerzo y el sacrificio de todo el equipo. Ahora a descansar para pensar en Venezuela”.
Fernández, que tiene la valla invicta de la Albirroja desde que asumió el entrenador Gustavo Alfaro, también declaró: “Lo que el profe nos dijo nos facilitó muchísimo; ya que conoce muy bien como juega Ecuador. Creo que fue un punto favorable que tuvimos en este encuentro”, concluyó.
Palpitando el cotejo del martes, contra Venezuela, de local, Alfaro tendrá nuevamente a disposición a dos futbolistas que estuvieron al margen por acumulación de tarjetas: Junior Alonso y Diego Gómez.