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La árbitra Zulma Quiñónez sembró un precedente en la historia del fútbol paraguayo, al dirigir por primera vez dos encuentros de primera división masculina, en el pasado Torneo Apertura 2023. En una amena charla con el Cardinal Deportivo, la jueza contó cómo forjó su brillante carrera.
La histórica designación para Guaireña-Guaraní
“La verdad que fue una sorpresa grande. Nosotros solemos esperar la designación, yo estaba entrenando en Reserva, Copa Paraguay e Intermedia. Cuando yo veo, me llega un mensaje que dice ‘ha sido designada como árbitro’. Ahí dije que no era la primera división, porque decía de árbitro, evidentemente era Intermedia o Reserva”.
“Cuando entré y encontré que era primera división, me congelé. Me senté un rato, pensé en ese partido. Me sorprendí ahí un momento”, expresó Zulma, antes de impartir justicia en la fecha 20.
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Sus inicios
“A mí siempre me gustó el deporte, en la ciudad donde yo vivía seguí lo que era el fútbol y otros deportes. Después salí de Eusebio Ayala y vine a estudiar en la Escuela de Educación Física. Me recibí de docente, terminé mi licenciatura y me metí más en lo que era el fútbol y necesitaba algo que me discipline de verdad”, comentó.
“En el 2007 me metí a estudiar en la Unión de Fútbol del Interior y ahí empecé a dirigir y antes de recibir mi título en la escuela de fútbol”.
“Dirigí en la UFI por un año, luego en 2008 pase a ser árbitra de la APF. En el 2012 fui convocada por la lista de arbitraje internacional y soy FIFA desde el 2012. Dirigí la B, la C, la Copa Paraguay, conocí lo que era la Intermedia y ahora primera división, que es lo máximo a lo que puedo llegar a hacer en nuestro país”, expresó la árbitra de 37 años.
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El trato con los jugadores
“Me sentí muy cómoda. El romper el hielo fue una presión muy dura, yo sabía que la responsabilidad era muy grande. Así como dicen que yo abrí puertas, yo pude haber cerrado las puertas también, porque la expectativa era muy grande. Tenía que responder y estar la altura”.
“Los jugadores en ningún momento me faltaron al respeto. Ellos se dedicaron a jugar, que nos hace mucho más fácil nuestro trabajo, eso hay que resaltar. Yo siempre trato de dar lo mismo, el respeto por sobre todo y como yo me comunico con ellos”, aseveró Zulma, que también estuvo a cargo de Trinidense-Nacional en la última jornada del Apertura.
“Dejar jugar” y “soñar”
“A mí me gusta el dejar jugar, no quiero cortar el juego, me gusta darle fluidez. Depende del ritmo, si yo me estoy dando cuenta dejar jugar un poquito y eso me va a traer complicaciones por el ambiente, bueno... No quiero decir siempre voy a dejar jugar, ni siempre voy a cortar, siempre voy a tratar de entender el contexto y de acuerdo a eso”, puntualizó, sobre su rasgo de arbitraje.
“Hay que soñar, siempre hay que soñar y trabajar sobre eso. Después el tiempo dirá. La idea de que se sueñe y se trabaje”, afirmó Quiñónez, acerca de la posibilidad de dirigir un Superclásico alguna vez.
¿Machismo en Paraguay?
“Sí, más todavía al inicio, era muy difícil. Primero luego, ver una mujer entrar a dirigir un partido de hombres, era muy chocante”, dijo Zulma. “El proceso que se hizo ayudó para que esto no sea tan novedoso hoy en día”, añadió.