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Un resultado generoso para el nivel de juego
Parecía que Cerro Porteño iba a liquidar el expediente por la vía rápida, por el dominio, la dinámica de su juego y su gol tempranero. Su rival casi no daba señales positivas como para adoptar una postura ofensiva e inquietante.
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Un servicio de esquina de Enzo Giménez fue conectado con un cabezazo en el primer palo por Alberto Espínola para establecer la ventaja del Ciclón, que lejos de seguir con la misma temática fue bajando preligrosamente, aunque en ningún momento sufrió el acoso legendario.
Todo estaba bajo control de los cerristas, hasta que una salida en falso de Juan Patiño complicó totalmente el panorama. Su pase central fue capturado por “Pirayú” Benítez. Luego del traslado del volante, el balón quedó en poder de Fernando Fernández, quien en el área se siente como pez en el agua. Definición serena para la igualdad.
Como se enredó solito, el elenco azulgrana necesitaba recuperar su fútbol que de intenso se volvió pausado, por la alta temperatura y una mejor postura de los aurinegros, que se dieron cuenta que como sin proponerse llegaron a la anotación, con algo más de fuerza ofensiva hasta podían ganar, al actuar sin presión alguna.
El árbitro dejó jugar bastante, haciendo pasar por alto algunas entradas fuertes, aunque esa actitud permitió algo más de fluidez al encuentro, que en su etapa final fue bastante discreto.
Con las modificaciones, Francisco Arce intentó buscar la forma de vulnerar la última línea aurinegra. El español Fernando Jubero, sin embargo, introdujo cambios tardíos, que no resultaron porque faltaba poco y los jugadores de “refresco” necesitaban tiempo para meterse en el fragor de la lucha.
El “match” se iba, el empate parecía cantado, hasta que luego de un tiro de esquina azulgrana y a la espera del ingreso de los futbolistas alternativos del Cacique sonó la alarma. Desde la cabina llamaron a David Ojeda para una revisión y allí se constató una especie de agarrón del joven Alexis Cantero sobre Piris da Motta. Una acción bastante rebuscada, que en cámara lenta parece penal pero que en velocidad normal deja dudas.
Claudio Aquino, con un disparo colocado, anotó el tanto de la victoria azulgrana. Sobre el final, el volante argentino tuvo una clara posibilidad para volver a marcar, pero su tiro dio en el travesaño.
Después de dos intentos fallidos volvió a ganar Cerro, que sigue en la pelea por el título, aunque este nivel no alcanza para llegar a la meta.
Para Jubero, el arbitraje fue influyente
El entrenador de Guaraní, Fernando Jubero (48 años), expresó que su equipo estuvo a la altura en la capital del Alto Paraná y que el staff arbitral, encabezado por David Ojeda, influyó en el resultado.
“Hemos hecho un buen partido, una buena primera parte, hemos controlado bastante bien. Al final, una decisión arbitral que incide en el resultado (agarrón de Cantero a Piris da Motta). Son cosas sobre las cosas que nosotros no podemos hacer nada”, mencionó.
El “Míster” dijo que el juez central estuvo bien ubicado en la acción que terminó inclinando la balanza a favor de Cerro Porteño. “El árbitro estaba en frente, ha dicho que continuara. No acabo de entender la jugada del penal. Son cosas que se escapan a lo futbolístico”, puntualizó el profesional español.
Arce y una necesaria victoria
Francisco Arce (51), conductor técnico de Cerro Porteño, destacó el triunfo sobre Guaraní, que era necesario para seguir en la carrera. Considera que el segundo gol llegó mediante la insistencia.
“Contento porque no es fácil ganar, menos en esta instancia. Necesitábamos hacerlo. Hubo momentos que nos costó mucho. Iniciamos muy bien, que es lo que siempre buscamos para después controlar, manejar mejor el juego. A partir del gol, como que nos quedamos, realmente fue peligroso hasta que nos empataron”, señaló el “Chiqui”.
“El segundo tiempo era cuestión de momentos y no ofrecer contraaques al rival. Creo que llegó (el gol del triunfo señalado por Claudio Aquino, de penal), por intentarlo, con las variantes.