Cargando...
Pensando en meter presión al escolta que tiene una parada difícil el domingo, Guaraní buscó los tres puntos este sábado frente al Sportivo Luqueño para acabar el día a seis de distancia en la cima. Por su parte, el rival de turno, también obligado a ganar por su lucha particular con mantenerse en Primera División, pretendía cortar la racha de tres empates.
El local no contó con su portero habitual Gaspar Servio debido a la sanción que le dio el Tribunal Disciplinario de la Asociación Paraguaya de Fútbol. De igual manera, el partido se le presentó favorable, salió a imponer su estilo y a los 11 festejó el primer gol de la noche.
Tras un mal despeje, Fernando Fernández recuperó un balón y asistió para que Alfio Oviedo, en el segundo poste, desatara la alegría aurinegra a los 11′. El Sportivo Luqueño no dio signos de reacción y estuvo a punto de recibir otro tanto a los 16′, cuando José Florentín robó la pelota, de la que se hizo cargo F. Fernández. Sin embargo, su tiro de frente a la portería pasó hacia un costado de ella.
Al minuto siguiente sí se amplió la ventaja local. Dentro del área y de espaldas al arco, F. Fernández recibió la pelota y la cedió a Marcelo González, quien de frente a la valla luqueña sacó un tiro que sacudió las redes después de un intento de despeje de Marcelo Palau. Guaraní bajó un poco la intensidad, pero Sportivo Luqueño prácticamente no inquietó en ataque.
A los 35′, un tiro cruzado de Enrique Borja no supo ser cerrado por Palau. El Aborigen volvió a pisar el acelerador a los 37′ y de una jugada que parecía penal, se quedó con 10 hombres. Ovideo asistió a M. González quien terminó pisando a Ángel Martínez. Cinco minutos después, tras revisar el VAR, el árbitro Juan López decidió expulsar al autor del segundo gol local.
El dueño de casa quedó descolocado durante el tiempo restante y a los 49′ descontó el Sportivo Luqueño. El conjunto visitante tocó y tocó hasta que Walter Ortiz envió el centro que Borja lo conectó de cabeza para acortar la diferencia.
Y Borja pudo concretar un doblete al poco de haberse iniciado el complemento. Ortiz sufrió la falta de Rodi Ferreira en el área, a los 49′, y el árbitro pitó el penal. De la ejecución se encargó Borja pero Devis Vásquez, el portero que reemplazó a Servio, desvió el remate del delantero. En la réplica, Rodrigo Fernández exigió a Pablo Gavilán.
El Auriazul tuvo la pelota, aunque ideas no. Hasta le costó jugar en terreno rival. Tras el penal, Vásquez pasó muchos minutos prácticamente sin actividad. El tiempo se le fue agotando a la visita, el Aurinegro aguantó y con lo último que le quedaba festejó un triunfo sufrido, pero que le permite dormir con seis puntos de ventajas sobre Cerro Porteño que el domingo recibe a Olimpia. Por su parte, el Sportivo Luqueño cae a la zona de promoción y Sol de América, que choca con Guaireña, puede aprovechar esta situación.