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Esteban Ostojich, en parte, es responsable de la eliminación de Paraguay de la Copa América. La selección perdió 4-3 con Perú en los penales, pero antes de la tanda, el árbitro había expulsado a Gustavo Gómez de manera incorrecta. El árbitro interpretó que el zaguero agredió con un manotazo a Lapadula en una jugada en la que disputaron el balón. El italo-peruano exageró y el charrúa comió el teatro.
Ostojich amonestó por segunda vez (la primera por protestar) y mostró la roja a Gómez. El zaguero reaccionó y trató de quedar cara a cara con el oriental, pero fue detenido y separado por Junior Alonso, Ángel Romero y Carlos González, entre otros. El enojo del jugador del Palmeiras no terminó en la escena sobre el césped sino que continuó en la boca de acceso a los vestuarios, donde el defensor esperó al árbitro.
Después de finalizar la etapa inicial, Eduardo Berizzo quedó al borde del campo para aguardar también a Ostojich, pero notó que Gómez estaba en la escalera, giró y pidió que lleven al guaraní de la zona. El capitán siguió en el lugar y tiró un par de frases, reclamando y desafiando al uruguayo. “Después nos llaman llorando para no boicotear la Copa América”, disparó mientras el referee caminaba hacia la zona.
Ostojich frenó la marcha para esperar que retiren a Gómez, quien pidió al juez que venga. “Vení, vení. Si sos hombre, vení, dale”, gritó el ex-Milan, quien posteriormente criticó a la Confederación Sudamericana de Fútbol. “Gracias @conmebol, excelente el árbitro”, escribió en Twitter. El defensor será suspendido por el Tribunal de Disciplina (también corre el riesgo de una sanción por las palabras en la red social).