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Era la segunda vez que el evento se desarrollaba en nuestro país, el anterior fue en 1967 en cancha de Olimpia. Paraguay había perdido la final ante la Argentina.
La historia que desembocaría en la obtención del título de campeón juvenill había empezado el año anterior. El martes 15 de diciembre de 1970, en la sesión de delegados de clubes de la Liga Paraguaya de Fútbol, fue nombrado director técnico de los juveniles Sinforiano García, entonces entrenador de las divisiones inferiores de Cerro Porteño. Queda para la anécdota la forma como se realizó la designación. Fue por votación, arrojando este resultado. De los 20 votos, trece favorecieron a García, cinco a Marcial Barrios y dos a Justo Pastor Leiva. Olimpia vetó la terna propuesta y fue apoyada por Alicio Molinas de Sol de América. Sin embargo, se respetó el resultado de la votación y “Sinfó” fue confirmado como entrenador de los juveniles.
El viernes 12 de febrero volvió a cambiar de entrenador la selección paraguaya, Benjamín Laterza se encargó del equipo.
ABC Color recordaba así el campeonato de 1971 en un artículo del 2018 cuando se festejaba el 47 aniversario de la conquista.
“El domingo 1 de marzo se iniciaba el campeonato, y Paraguay integraba el grupo B, junto a Bolivia, Chile y Uruguay. La serie A, estaba conformada por Argentina, Brasil, Perú, Colombia y Venezuela. Esa noche con el empate de 2-2 entre Colombia y Venezuela por la serie A y el posterior acto protocolar, se inauguraba el evento regional juvenil”.
“La selección paraguaya debutaba el domingo 7 de marzo enfrentando a su similar de Bolivia. Fue triunfo a albirrojo por 3-1, con tantos de Diarte, Cino y Maldonado, pero en el partido resaltaron más los defectos, que las virtudes y la necesidad de urgentes correcciones”.
“Otra pobre presentación de la selección fue el sábado 13 de marzo, con el empate de 1-1 ante Chile, en su segundo encuentro del Sudamericano. Los chilenos se pusieron en ventaja casi al inicio del cotejo, empatando el puntero derecho Celso Báez, en su única presentación en el torneo. El jueves 18 de marzo, con un gran trabajo de Tito Ramón Correa, dos goles del “Verdugo” Cristóbal Maldonado y el equipo en franco progreso futbolístico, la selección derrotaba por 2-0 a la uruguaya y así clasificaba a las semifinales en forma invicta. El onceno tomaba forma de conjunto homogéneo y se avisoraban mejores actuaciones de los paraguayos”.
“Los “incaicos”, que eliminaron en forma casi milagrosa a los brasileños, eran nuestros rivales en semifinales. Inicialmente el encuentro estaba previsto para el domingo 21 de marzo, pero un fuerte temporal postergó la jornada para el día siguiente. Esa noche los juveniles paraguayos realizaron su mejor partido en el campeonato y con anotaciones de Diarte, Aifuch (un cañonazo de 40 metros) y Cristóbal Maldonado y tras ir en desventaja, se adjudicaron finalmente el lance por 3 a 1, en gran remontada”.
El jueves 25 de marzo Paraguay disputaba la final frente a Uruguay, que había eliminado a la Argentina en la otra semifinal. El primer tiempo finalizó con marcador en blanco, mereciendo la tricolor por lo menos estar en ventaja por dos goles de diferencia.
Uruguay se puso en ventaja en el marcador en el minuto 21 y después de mucho insistir llegó la igualdad de Paraguay con el gol de Roberto Cino que le dio a la albirroja el título de campeón.