“Tengo un cariño enorme por el Santos, por la ciudad y por el club. Gratitud eterna. A través del Santos hice realidad todos mis sueños” y “si tengo el privilegio de jugar la Libertadores de nuevo, daré la vida”, señaló el atacante de 36 años en un directo en sus redes sociales.
Asimismo dijo que, en caso de regresar a su país, lucharía para que el club donde se formó, al igual que Pelé y Neymar, “dispute todos los torneos” posibles. La cúpula directiva del Santos ha manifestado públicamente su deseo de repatriar a Robinho, quien ya ha pasado en tres ocasiones por la disciplina albinegra.
Sin embargo, el exjugador de Real Madrid, Manchester City y Milán, entre otros equipos, recordó que aún tiene contrato con su actual club, el Istanbul Basaksehir, de la Superliga de Turquía. El vínculo terminaba a final de este mes, pero Robinho reveló que el club turco aplicará una medida excepcional de la FIFA que permite prorrogar los contratos hasta que concluyan las competiciones de la presente temporada, suspendidas por la crisis del coronavirus.
“Era para terminar ahora, pero se extendió el final del campeonato” y “la FIFA dio esa excepción”, explicó el futbolista para añadir después que “el futuro pertenece a Dios”. Por otro lado, el Basaksehir también podría renovar automáticamente el contrato de Robinho por un año más, pero esa posibilidad parece remota según la prensa local brasileña.
El extremo izquierdo fue presentado con el Basaksehir en enero de 2019, tras un año en el Sivasspor, también de Turquía. Con el Santos, fue subcampeón de la Libertadores en 2003 y ganó dos títulos de Liga (2002 y 2004), antes de poner rumbo al Real Madrid en 2005, con el que inició su carrera en el fútbol europeo.EFE