Gómez se encuentra aislado en Bérgamo, en la norteña región Lombardía, junto a su familia e informó que está bien, aunque destacó que es “triste” levantarse por la mañana y escuchar los datos sobre las víctimas mortales, que ya son 5.476, y los contagiados, ya más de 46.000.
“Mi estado de ánimo no es el ‘top’. La situación del país no es la mejor, uno trata de ser positivo, pero cada día hay noticias feas. Cuando te levantas y miras las noticias te entra tristeza. No se puede hacer otra cosa que quedarnos en casa, ser positivos y esperar que todo esto pase pronto”, afirmó Gómez en declaraciones a la televisión italiana Sky Sport.
“En los últimos cuatro años con el Atalanta hemos dado mucha felicidad a una ciudad entera. Lo que vivimos ahora es algo terrible, que todavía no sé explicar, no afecta solo a Bérgamo sino a toda Lombardía y toda Italia. Somos el país más afectado”, aseguró.
“Deberíamos estar felices por nuestros resultados como club, orgullosos, pero ahora tenemos que pensar en las familias que están sufriendo”, agregó.
Antes de la interrupción de la competición a causa de la emergencia, el media punta argentina vivía una temporada histórica con el Atalanta, en la que había sellado el pase a los cuartos de final de la Liga de Campeones tras eliminar al Valencia en los octavos.