“Hola, ¿qué tal? Yo soy Keisuke Honda, y es un placer. Yo juego en el Botafogo, y vamos a vernos en Río de Janeiro. Hasta luego, muchas gracias. ¡Chao!”, declaró el japonés en un video publicado en su perfil de la red social Twitter, después de varios días de negociaciones con el equipo de carioca.
Poco después, el Botafogo divulgó en su cuenta un video con animación de videojuegos de la década del 80, subtítulos en inglés y portugués y con música japonesa de fondo.
“Hola Honda, bienvenido al mundo del Botafogo” (en inglés) y “Honda llegó”, fueron los mensajes del club. Honda, que no tenía equipo, recibirá un salario fijo mensual más comisiones y bonificaciones por desempeño, además del 20 % alcanzado por las campañas de mercadotecnia.
Honda debutó como profesional en 2004 con el Nagoya de su país, y después fue transferido al club holandés VVV-Venio, con el que jugó entre 2007 y 2010 antes de partir para el ruso CSKA de Moscú (2010-2014) y dar el salto al poderoso Milán de Italia (2013-2017).
Fichó por Pachuca mexicano (2017-2018) y pasó luego al Melbourne Victory australiano (2018-2019). En 2019 tuvo un paso fugaz por el Vitesse de Arnhem holandés. Con Japón, Honda jugó los mundiales de Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018, torneo último en el que anunció su retiro como jugador de la selección nipona.