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Desde la aparición del nuevo reglamento, firmado por once de los doce clubes (no firmó Olimpia) de Primera, para que los grandes también vayan a los estadios de sus respectivos rivales, Olimpia y Cerro Porteño están obligados a salir del Defensores del Chaco, donde acostumbraban a jugar contra los equipos que no tenían el escenario para recibir a una gran masa.
En el Torneo Clausura, el Ciclón ya jugó en el Luis Alfonso Giagni de Sol de América, en el Adrián Jara de General Díaz, entre otros, mientras que el Decano visitó a Guaraní en el Rogelio Livieres. En esta ocasión, el líder del campeonato volverá al estadio de River Plate luego de 27 años.
En el historial del fútbol paraguayo, el último enfrentamiento entre River y Olimpia en el barrio Mburicaó data de 1992. El 5 de abril de aquel año, igualaron 0-0 por la entonces Copa República (actualmente, Copa Paraguay). En esa ocasión, el local recaudó 12.756.000 de guaraníes por 3.508 boletas vendidas. Hoy, con una escenario con nuevas graderías, el visitante tendrá 4.000 localidades.
Dos años antes, por el campeonato de Liga de 1990, el Kelito y el Decano jugaron un 15 de julio: igualaron 1-1, con goles de Aníbal Araújo (River) y Carlos Guirland (Olimpia). Abonaron sus entradas 2.950 personas y River ingresó 6.217.000 guaraníes.