“Yo no iría y tampoco irían todas las compañeras de equipo con las que he hablado explícitamente”, dijo Rapinoe en el programa “Anderson 360” de la cadena CNN. “No creo que nadie en el equipo tenga interés en prestar la plataforma (mediática) por la que hemos trabajado tan duro y las cosas por las que luchamos y la forma en que vivimos nuestra vida. No creo que queramos que eso sea corrompido por esta administración”, dijo Rapinoe.
La capitana, una de tantas jugadoras lesbianas del equipo, también apuntó al célebre eslogan ’Make America Great Again (Devolver la grandeza a Estados Unidos)’ de Trump, diciendo que el presidente está mirando hacia un pasado que “no fue bueno para todos”.
“Yo diría que su mensaje está excluyendo a las personas. Me está excluyendo. Está excluyendo a las personas que se parecen a mí. Está excluyendo a las personas de color”, dijo la futbolista cuando se le preguntó qué mensaje tenía para Trump.
“Puede que haya sido genial para algunas personas y quizás Estados Unidos sea bueno para algunas personas en este momento, pero no lo es para suficientes estadounidenses en este mundo”. insistió Rapinoe. Estados Unidos derrotó a Holanda 2-0 con un penal de Rapinoe, que había jurado antes de la victoria quedarse en casa si Trump invitaba al equipo a Washington. El presidente respondió en Twitter que “Megan nunca debe faltarle el respeto a nuestro país, la Casa Blanca o nuestra bandera, especialmente porque se ha hecho mucho por ella y por el equipo”.
Los planteles campeones son tradicionalmente honrados con una invitación a la Casa Blanca en Estados Unidos, aunque Trump a veces ha revocado las invitaciones después de que algunos miembros de los equipos lo criticaran. Entre los equipos que han rechazado la oferta se encuentran los Golden State Warriors de la NBA y los ganadores del Superbowl del año pasado, los Philadelphia Eagles de la NFL.