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Olimpia está a 90 minutos de poder conseguir otro título para sus vitrinas tras derrotar este domingo a Tacuary en el estadio Roberto Béttega de Zeballos Cué, pero quedará en nuestra memoria los seis expulsados de Tacuary y de un penal que, no fue, a favor del Olimpia.
A muchos olimpistas no les gustó el título "Olimpia gana pero con ayuda arbitral" pero nadie en este país puede defender el grosero penal que cobró Arnaldo Samaniego a favor del club franjeado. A casi un metro del área de Tacuary.
Samaniego cobró penal y expulsó al portero Carlos Servín, dejando a Tacuary con diez hombres, condicionando el rumbo del partido, que cuando eso iba 1-0. "Error" es poco, aunque destaquemos también que Samaniego tuvo errores que favorecieron a Tacuary.
El título creó roncha, pero en este Torneo Clausura 2011 las cosas no marcharon bien con el arbitraje, con errores increíbles que hasta rozaron el desconocimiento del reglamento por parte de algunos jueces.
El mismo señor Arnaldo Samaniego había cobrado dos penales que no fueron en el duelo Cerro Porteño-Tacuary, uno para cada equipo y dejando de cobrar otro que si fue.
A pesar de que el Club Olimpia puede gritar campeón el próximo domingo y que el plantel franjeado tuvo sus méritos para llegar donde está, no se puede tapar el sol con un dedo. El error de Arnaldo Samaniego fue brutal, cambió el rumbo del compromiso, dejó con un hombre menos al rival y sin ese gol de Olimpia, por medio del penal, el puntero hoy era Cerro Porteño. Así de simple.
Pero si vamos escarbando, hay decisiones de la misma Asociación Paraguaya de Fútbol, que condicionaron el rumbo del Torneo, así como le dieron los puntos a Gral. Caballero porque un hincha de Rubio Ñu hirió al portero rival con un petardo, por decisión del Tribunal Disciplinario de la APF.
Correspondía también que los puntos del compromiso Libertad-Cerro Porteño vayan para Tuyucuá, para ser coherentes digo, nada más la aplicación de la regla, sin reuniones dirigenciales de por medio, en las madrugadas asuncenas.
Lo que pasó este año con el árbitro Ulises Mereles es solo un botón de muestra, incurriendo en un error grave, como sacar dos tarjetas amarillas y no expulsar a un jugador (Tacuary-Libertad). Lo que es interesante es que el propio Mereles había cometido el mismo error en el 2010, en el duelo Sport Colombia-Cerro Porteño.
Pero no haré una larga lista de perjudicados, pues todos los equipos del fútbol local lo fueron, lo que debería preocupar, no solo a los hinchas y dirigentes, sino a la misma Dirección de Árbitros de la APF, que a veces parece cruzarse de brazos y no hacer mucho.
En fin, usted más que nadie, que tiene su club, recordará todos los errores que hubo en ambos torneos, tanto Apertura como Clausura. Pero insisto, no se puede tapar el sol con un dedo, a pesar de que algunos lo intenten descaradamente.
A muchos olimpistas no les gustó el título "Olimpia gana pero con ayuda arbitral" pero nadie en este país puede defender el grosero penal que cobró Arnaldo Samaniego a favor del club franjeado. A casi un metro del área de Tacuary.
Samaniego cobró penal y expulsó al portero Carlos Servín, dejando a Tacuary con diez hombres, condicionando el rumbo del partido, que cuando eso iba 1-0. "Error" es poco, aunque destaquemos también que Samaniego tuvo errores que favorecieron a Tacuary.
El título creó roncha, pero en este Torneo Clausura 2011 las cosas no marcharon bien con el arbitraje, con errores increíbles que hasta rozaron el desconocimiento del reglamento por parte de algunos jueces.
El mismo señor Arnaldo Samaniego había cobrado dos penales que no fueron en el duelo Cerro Porteño-Tacuary, uno para cada equipo y dejando de cobrar otro que si fue.
A pesar de que el Club Olimpia puede gritar campeón el próximo domingo y que el plantel franjeado tuvo sus méritos para llegar donde está, no se puede tapar el sol con un dedo. El error de Arnaldo Samaniego fue brutal, cambió el rumbo del compromiso, dejó con un hombre menos al rival y sin ese gol de Olimpia, por medio del penal, el puntero hoy era Cerro Porteño. Así de simple.
Pero si vamos escarbando, hay decisiones de la misma Asociación Paraguaya de Fútbol, que condicionaron el rumbo del Torneo, así como le dieron los puntos a Gral. Caballero porque un hincha de Rubio Ñu hirió al portero rival con un petardo, por decisión del Tribunal Disciplinario de la APF.
Correspondía también que los puntos del compromiso Libertad-Cerro Porteño vayan para Tuyucuá, para ser coherentes digo, nada más la aplicación de la regla, sin reuniones dirigenciales de por medio, en las madrugadas asuncenas.
Lo que pasó este año con el árbitro Ulises Mereles es solo un botón de muestra, incurriendo en un error grave, como sacar dos tarjetas amarillas y no expulsar a un jugador (Tacuary-Libertad). Lo que es interesante es que el propio Mereles había cometido el mismo error en el 2010, en el duelo Sport Colombia-Cerro Porteño.
Pero no haré una larga lista de perjudicados, pues todos los equipos del fútbol local lo fueron, lo que debería preocupar, no solo a los hinchas y dirigentes, sino a la misma Dirección de Árbitros de la APF, que a veces parece cruzarse de brazos y no hacer mucho.
En fin, usted más que nadie, que tiene su club, recordará todos los errores que hubo en ambos torneos, tanto Apertura como Clausura. Pero insisto, no se puede tapar el sol con un dedo, a pesar de que algunos lo intenten descaradamente.