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Por Jorge Rojas Barboza Libertad comenzó auspiciosamente el torneo Clausura al ganarle ayer 2-0 a Recoleta en su propio estadio. Fue el triunfo de un equipo sobrio y equilibrado en todas sus líneas ante otro que como mejor arma tuvo el entusiasmo, que se fue desdibujando a medida que transcurrían los minutos del compromiso.
Recoleta entró pensando en comenzar a andar tras ese difícil operativo que tiene enfrente, que es ganar la mayor cantidad de puntos que le permitan su continuidad en la categoría profesional. Así, sus hombres pusieron todas las ganas, el mayor despliegue físico, pero no estuvo acompañado de la precisión a la hora de anotar, pese a un par de buenas ocasiones.
Fue Tobie Mimboe el que protagonizó la mejor y más clara jugada de gol para el conjunto aurinegro. En el segundo córner al hilo ejecutado desde el sector izquierdo del ataque, Mimboe se elevó con perfección y cabeceó con potencia, pero Villar se hizo figura al ``volar`` junto al poste derecho de su arco para evitar la caída.
Ortellado ni Bareiro ni Garay trascendieron pese al empeño, solo Lorenzo Cabañas multiplicándose por el medio, tratando de llevar algún peligro a las cercanías del área rival, pesó algo, pero sus intentos ``morían`` cuando llegaba cerca de Villar.
Libertad se cubrió bien, atacó esporádicamente y con tremenda efectividad. Se llegaba a la media hora de juego y apareció la primera ``monada`` del partido: Jorge Brítez sacó un remate de media distancia que se coló en el ángulo del arco de Achucarro para poner a Libertad en ganador.
No cambiaron las cosas en lo que quedó del primer tiempo. En el segundo, Recoleta ingresó con las mismas intenciones y limitaciones. En el cuadro liberteño había ingresado Edgar Robles y, tras un par de intentos, logró meter un pase perfecto para que otro ``mono`` entrara en acción.
Virgilio superó la marca, enfrentó a Achucarro y lo sometió con precisión para hacerse presente en lo que sabe, en el que es el juego debut con la casaca liberteña. Así se redondeó un resultado a favor de Libertad que empieza nuevamente a andar por la senda del triunfo.
Recoleta entró pensando en comenzar a andar tras ese difícil operativo que tiene enfrente, que es ganar la mayor cantidad de puntos que le permitan su continuidad en la categoría profesional. Así, sus hombres pusieron todas las ganas, el mayor despliegue físico, pero no estuvo acompañado de la precisión a la hora de anotar, pese a un par de buenas ocasiones.
Fue Tobie Mimboe el que protagonizó la mejor y más clara jugada de gol para el conjunto aurinegro. En el segundo córner al hilo ejecutado desde el sector izquierdo del ataque, Mimboe se elevó con perfección y cabeceó con potencia, pero Villar se hizo figura al ``volar`` junto al poste derecho de su arco para evitar la caída.
Ortellado ni Bareiro ni Garay trascendieron pese al empeño, solo Lorenzo Cabañas multiplicándose por el medio, tratando de llevar algún peligro a las cercanías del área rival, pesó algo, pero sus intentos ``morían`` cuando llegaba cerca de Villar.
Libertad se cubrió bien, atacó esporádicamente y con tremenda efectividad. Se llegaba a la media hora de juego y apareció la primera ``monada`` del partido: Jorge Brítez sacó un remate de media distancia que se coló en el ángulo del arco de Achucarro para poner a Libertad en ganador.
No cambiaron las cosas en lo que quedó del primer tiempo. En el segundo, Recoleta ingresó con las mismas intenciones y limitaciones. En el cuadro liberteño había ingresado Edgar Robles y, tras un par de intentos, logró meter un pase perfecto para que otro ``mono`` entrara en acción.
Virgilio superó la marca, enfrentó a Achucarro y lo sometió con precisión para hacerse presente en lo que sabe, en el que es el juego debut con la casaca liberteña. Así se redondeó un resultado a favor de Libertad que empieza nuevamente a andar por la senda del triunfo.