Después del habitual trabajo físico, Costas separó al cuarteto defensivo integrado siempre por Juan Cardozo, Carlos Báez, Pedro Benítez y Ernesto Cristaldo, junto al volante de marca y capitán de equipo Mario Grana para un exigente, como fino entrenamiento táctico con la pelota en ataque y defensa. Bastante exigió el técnico azulgrana a estos cinco, frente a otros tantos de la plantilla que están a la pesca de aparecer en el cuadro base.

Mientras se cumplía esta tarea táctica, los demás trabajaron en otro sector del campo de la Olla con el asistente Rubén Rivas en llegadas y definiciones. Luego de un breve descanso para calmar la sed, Costas volvió a mover al quinteto defensivo, pero después ya convocó a Domingo Salcedo y Juan Fernández (ocupó el lugar de Walter Fretes) para seguir con el mismo entrenamiento hasta que se sumaron los atacantes Alejandro da Silva y Jorge Achucarro, para dar continuidad al mismo trabajo, pero ya sin los zagueros centrales (Báez y Benítez). Es decir terminaron entrenando con un plan táctico de tinte ofensivo, con la inclusión de los laterales Cardozo y Cristaldo.

Pero Julio dos Santos no se apartó de la cuadrilla que trabajó en definiciones y después de la práctica, en la que se notó sobrado optimismo y ganas de trabajar, Costas asintió que el equipo será el mismo que arrancó contra Tacuary, pero apuntando la posible aparición desde el vamos de Da Silva. Entonces, Walter Fretes, que solo cumplió con una tarea diferenciada (hoy hará lo mismo) y Carlos Báez, que evidenció aún el fuerte dolor en el hombro izquierdo tras la práctica de ayer, jugarán ante los albos.