“Voy a esperar este mes y ver cómo me siento. Si me siento como un exjugador o no. Si empiezo a extrañar o cómo lo siente mi cuerpo”, escribió en una columna con su firma que publica este miércoles el diario argentino La Nación.
El jugador, de 37 años, admitió que en su larga trayectoria es la primera vez que se plantea dar un paso al costado de las canchas. El hecho se produce luego de un fin de semana de pesadilla para San Antonio, vigente campeón de la liga estadounidense, eliminado el domingo por Los Angeles Clippers, ganador de la serie de primera ronda de playoffs en la Conferencia Oeste de la NBA.
“Es un momento único, nunca estuve en esta situación. Fugazmente lo pensé en 2013, pero a la semana o a los 10 días sabía que quería tomar otro desafío y que no era ese el momento” del retiro, explicó. Según relató, el escolta recibió el respaldo de San Antonio para seguir una temporada más, pero aún así no ha decidido si aceptará.
“Esas palabras te ayudan en lo emotivo, en confianza, en sentimiento, pero no estoy en un momento en el que necesito el trabajo. No pasa por sentir que si me quieren sigo, sino de definir si realmente tengo ganas de hacerlo y meterme en todo ese trajín”, admitió.
El mes pasado Ginóbili ya había dado pistas acerca de un pronto retiro. En esa ocasión había considerado ínfima la posibilidad de vestir la casaca argentina en los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro-2016. “Me encantaría mantener ese sueño vivo de jugar un Juego Olímpico, pero la realidad es que es ínfima la chance porque ya no me da el cuero (no resisto)”, había dicho el estandarte de la llamada ’Generación Dorada’ del básquetbol argentino.
Ginóbili se había quedado al margen de los Mundiales de Turquía-2010 y de España-2014. Con Argentina, Ginóbili fue subcampeón en el Mundial Indianapolis-2002 y en los Juegos Olímpicos obtuvo el oro en Atenas-2004 y el bronce en Pekín-2008. Además estuvo en el equipo argentino dos veces campeón del Torneo de las Américas, como local en 2001 y en 2011, cuando clasificó para los Juegos Olímpicos de Londres-2012, en el que terminó en el cuarto puesto.