El partido será revancha de las semifinales de los pasados playoffs en los que los Cavaliers eliminaron a los Bulls, que esta temporada llegan más experimentados y además con nuevo entrenador, el novato Fred Hoiberg, que sustituye en el cargo a Tom Thibodeau, que fue despedido al concluir la pasada temporada.
Los Bulls, que juegan en su campo del United Center, llegan al partido llenos de optimismo después que han recuperado al base estelar Derrick Rose, que volvió a los entrenamientos al superar la lesión sufrida en el ojo izquierdo y que le obligó a pasar por el quirófano.
Rose ya lleva desde la pasada semana entrenando con el equipo y la recuperación de la fractura que sufrió en el hueso orbital izquierdo y que necesitó de una intervención quirúrgica ya está superada. El base estrella de los Bulls también se siente identificado y conoce el nuevo esquema de juego de Hoiberg con el que ha mantenido conversaciones permanentes.
El pasado viernes, Rose participó con el equipo en el partido de exhibición que disputaron ante los Mavericks de Dallas y aunque Hoiberg le dio sólo 10 de acción, respondió bien. Rose, quien usó una máscara protectora y sigue teniendo problemas para enfocar bien con el ojo izquierdo, anotó 10 puntos al encestar 4 de 6 tiros de campo.
“No pretendo exponerme en ningún sentido, pero cada día estoy mejor, cada día veo mejor con el ojo izquierdo, y eso me hace sentir que estaré preparado para el partido del martes”, explicó Rose. El base titular de los Bulls se siente bien físicamente y junto a los españoles Pau Gasol y Nikola Mirotic, que brillaron en el pasado Eurobasket con la selección nacional, que salió campeona, esperan dar la primera gran alegría a Hoiberg y a los aficionados con la victoria ante los que serán los rivales a vencer si quieren luchar por un título de liga.
El que ya poseen los Warriors de Golden State, que también verán acción y recibirán los anillos de campeones antes que de comienzo el partido contra los Pelicans de Nueva Orleans, que estrenan entrenador con Alvin Gentry, que la pasada temporada fue uno de los asistentes bajo la dirección del novato Steve Kerr, que está de baja tras tenerse que someter a dos operaciones de espalda.
El exjugador Luke Walton ocupara su puesto, pero tendrá a su alrededor a los mejores profesionales que le apoyen en su debut en el cargo como es el ex base canadiense y premio MVP de la liga, Steve Nash, que trabaja de asesor del equipo. Los Warriors quieren demostrar desde el inicio de la nueva temporada, con el base Stephen Curry de líder, que lo conseguido la pasada liga no fue producto de la suerte, como han especulado algunos profesionales de la NBA y periodistas, sino que lo lograron por la calidad de su juego.
El primer partido la jornada será el que disputen en la Conferencia Este, los Hawks de Atlanta, con la novedad del pívot brasileño Tiago Splitter, ante los Pistons de Detroit.