Aunque con una ligera menor asistencia que en el anterior partido, los aficionados angelinos se acercaron al estadio Crypto.com Arena, ubicado en el corazón de la ciudad de Los Ángeles, ante lo que podría ser la última oportunidad de ver jugar en casa a las estrellas Luka Doncic o LeBron James.
De perder este encuentro, los Lakers afrontarían otros dos partidos en campo rival que pueden complicar sus aspiraciones de conquistar la NBA.
Larga filas que se formaron para en las puertas de ingreso al interior del recinto, donde entre las hileras de sillas que rodea el estadio se descubría un regalo: una toalla de los Lakers, en lo que muchos interpretaron como un anticipo de lo que supondrá este encuentro.
