El pívot francés, nacido hace 21 años en Le Chesnay (periferia parisina), ha regresado, esta vez con los 'Spurs', al pabellón de Bercy, seis meses después de conquistar la plata en los Juegos de París con los 'bleus'.
El primer partido ante los 'Pacers', que se ha saldado este jueves con victoria de los Spurs 140-110 y con un gran actuación de la estrella gala (30 puntos, 11 rebotes, 6 asistencias y 5 tapones), ha sido más que suficiente para comprobar que la 'wembymanía' está en plena forma.
La camiseta de los 'Spurs' con el número '1' estampado copó buena parte del coliseo de Bercy, lleno hasta la bandera con 20.000 espectadores. No en vano, la zamarra de 'Wemby' es ya la quinta más vendida entre los jugadores de la NBA en activo y la segunda en el mercado europeo. Y eso que el francés lleva solo un año y medio en la NBA.
"Pero hay otro indicador que es más interesante para hacerse una mejor idea del impacto de 'Wemby', que es el que mide el tipo de visualizaciones y el tiempo que los usuarios se quedan. Cuando hablamos de los extractos de las mejores acciones en un partido ('highlights'), Wembanyama es el segundo más visto, solo detrás de LeBron James", comenta a EFE Julien Lepron, especialista en márketing deportivo.
Para el consultor, el impacto publicitario de 'Wemby' se asemeja al de otro genio del deporte francés, Mbappé.
"Son dos jóvenes que han demostrado que tienen la cabeza muy bien amueblada, con una capacidad intelectual muy superior a la de chavales de 18 o 19 años".
Los dos son también producto de una cierta meritocracia. Proceden de ciudades de la periferia de París y no tuvieron la red de contactos habitual entre los que crecen en ambientes privilegiados. "Lo que tienen se lo han ganado a pulso. Además, vienen de la diversidad cultural que es Francia", sostiene Lepron, en alusión de los orígenes africanos de las familias de ambos.
Cinco años más joven que el delantero del Real Madrid, 'Wemby' dispone además de un margen de progresión deportiva y comercial sin parangón.
"Wemby populariza el lujo"
El millonario contrato que Wembanyama firmó con Nike -se estima en unos 100 millones durante varios años- se une al que suscribió en 2024 con Louis Vuitton, la marca más conocida del grupo de lujo francés LVMH.
"La llegada de Pharrell Williams (rapero y productor musical) como director creativo de la marca (en 2023) supuso un punto de inflexión, porque el lujo se ha abierto a segmentos que estaban alejados de él", comenta Lepron.
En un contrato estimado en torno a 1 millón de euros, la imagen 'Wemby' ha servido para que la marca extienda su mercado a los nichos urbanos de Estados Unidos y Europa, detalla el especialista en márketing.
El internacional francés, que como Mbappé es muy selectivo a la hora de representar marcas, presta también su imagen a la empresa emergente de bebidas energéticas Barcode -de la que también es inversor-, a la firma de vídeojuegos 2K Games, y a la plataforma global de deportes digitales Fanatics.
'Wemby' ha dejado muy claro su credo: "La imagen que quiero dar cuenta mucho más que ganar dinero o firmar el máximo número de contratos. Cada marca que elijo es porque representa las ideas en las que creo".