En declaraciones a los medios del catalán, el técnico ha admitido que de inicio les faltó intensidad: "En la primera parte, sobre todo en el primer cuarto, vamos por detrás en situaciones de juego en las que no tenemos nuestro ritmo y nos entran las dudas".
"Al final del segundo cuarto encontramos el ritmo y llegamos al descanso con un resultado bastante bueno para lo que habíamos hecho. Y en el tercer cuarto ellos han tenido todo el acierto en el triple que les había faltado hasta entonces y eso ha hecho que nos fuéramos a un resultado elevado, pero ya estábamos en dinámica positiva", ha analizado.
Peñarroya ha asegurado que el Barça tuvo "opciones para romper el partido" entre el final del tercer cuarto y el inicio del último periodo, pero les faltó "acierto en situaciones fáciles".
"Hemos tenido alguna pérdida y algún error en el tiro de tiros cómodos. No hemos sabido ir al tiro libre, cosa que Cordinier sí ha sabido hacer bien. Al final, se nos escapa un partido que era muy ajustado y podría haber ganado cualquiera", ha resumido.
Por su parte, el pívot Willy Hernangómez ha asegurado en declaraciones a los medios del club que es "una pena" no haber podido llevarse la victoria en un encuentro en el que el Barça ha tenido algunos "momentos de desconexión" y otros en los que ha "estado muy bien".
"Hemos empezado mal, sin ayudarnos, pero al final del primer cuarto hemos vuelto a ser nosotros mismos", ha analizado el pívot madrileño, que sin embargo a señalado a la gestión de los últimos minutos como la clave de la derrota.
"Hemos remontado y nos hemos puesto por delante, pero no hemos sabido asegurar la victoria en los dos minutos finales. Este era un partido importante, es una derrota complicada", ha reconocido el internacional español, de los mejores en el Barça con 14 puntos.
Preguntado por qué debe hacer el equipo para mejorar, Hernangómez ha apelado a la unidad de la plantilla: "Tenemos que ayudarnos más que nunca, confiar los unos en los oros. Es un momento para ponerse el casco e ir a la guerra todos juntos, empezando por el partido del domingo en casa ante un rival durísimo (MoraBanc Andorra)".
"Cada partido es una final y ahora más si cabe. Tenemos que darlo todo, tenemos que arrimar el hombro, dejarnos la piel en la pista y luchar cada partido. Es la única solución que hay ahora para volver a coger una dinámica positiva, darle la vuelta a esta situación y volver a confiar en nosotros mismos y volver a disfrutar", ha concluido.