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Antetokounmpo, que firmó 40 puntos y 13 rebotes, salió vencedor por 115-111 de una batalla de titanes en el Barclays Center de Brooklyn ante Durant, que terminó con 48 puntos, la mayor anotación en un séptimo partido de playoffs.
La superestrella de los Nets, que estuvo en pista los 53 minutos de partido, había forzado el tiempo extra con un espectacular tiro lejano casi sobre la bocina.
“Es el mejor jugador del mundo, lo dije hace dos días y lo repito ahora”, le reconoció Antetokounmpo, que respiró aliviado al seguir su camino hacia sus ansiadas primeras Finales.
“Ha sido un gran paso para esta organización pero el trabajo no está hecho. Ese ha sido el mensaje en el vestuario”, recalcó el dos veces MVP (Jugador Más Valioso) de la NBA. “Cuando sepamos quién es el próximo oponente hay que dejar esto atrás”.
Los Bucks jugarán su segunda final de conferencia de los últimos tres años ante los Philadelphia 76ers o los Atlanta Hawks, que también definirán su serie en un séptimo juego el domingo.
Esta eliminación es un enorme mazazo para los Nets, un modesto equipo que logró reunir a tres superestrellas (Durant, James Harden y Kyrie Irving) con el único objetivo de conquistar el anillo de la NBA.
Cuando han contado con su ‘Big 3’, los Nets han sido prácticamente imparables pero las lesiones azotaron toda la temporada a sus figuras, especialmente en esta semifinal de conferencia.
James Harden tuvo que abandonar el primer partido en el primer minuto al recaer de su problema de isquiotibiales y tuvo que regresar de urgencia por el esguince de tobillo que sufrió Irving en el cuarto.
Harden, que jugó muy limitado por su problema muscular, anotó 22 puntos el sábado, pero con una negativa estadística de 5/17 en tiros de campo.
“Es muy frustrante para mí”, dijo el tres veces máximo anotador de la NBA. “Dimos lo que pudimos, pero sufrimos lesiones todo el año (...) Tenemos que cuidar de nuestro cuerpo y estar listos para la próxima temporada”.
Durant, en cambio, relativizó el impacto de las lesiones sufridas y subrayó el nivel mostrado por sus rivales.
“Todos los equipos han pasado por adversidades esta temporada”, afirmó el dos veces ganador de la NBA con los Warriors. “Estoy seguro de que otros equipos han pasado por lo mismo que nosotros”.
“Hay que darle crédito a Milwaukee. Son un gran equipo y tienen muchas opciones de ganar el campeonato. Tuvimos buenas oportunidades en la prórroga, pero no entraron”, dijo Durant, que también sumó 4 triples, 9 rebotes y 6 asistencias.
Un duelo de máxima tensión
La tensión sobrevoló el juego desde el arranque en el Barclays Center donde, cualquiera que fuera el resultado, uno de los principales candidatos al título iba a sufrir una temprana eliminación.
Con Kyrie Irving vestido de calle en el banquillo, los Nets veían con alivio como Harden lucía mejorado de sus problemas físicos, con más movilidad que en los partidos anteriores.
Con poco apoyo de sus escuderos, Giannis Antetokounmpo tenía toda la presión encima y el público trataba de explotar su inseguridad desde la línea de tiro libre (8/14 en el partido), llegando a realizar dos lanzamientos que ni siquiera tocaron el aro.
Sus dos mejores aliados, Middleton (23 puntos) y Jrue Holiday (13), llegaron al descanso con una nefasta estadística de 4/22 en tiros de campo.
Durant concentraba sobre sus hombros el ataque de Brooklyn, que llegó al descanso con una ligera ventaja de seis puntos (53-47).
Los Bucks regresaron con fuerza del vestuario y lograron un parcial de 12-2 con el que se ponían en ventaja 59-55, con Giannis encontrando un aliado en Middleton, que entró por fin en el partido.
Harden, en cambio, se iba apagando físicamente y comenzó a errar triple tras triple (2/12 en total).
El juego llegó con solo un punto de diferencia de los Bucks a un último cuarto de infarto.
Durant acercó a los Nets a dos puntos con 30 segundos por jugar y Middleton erró el siguiente triple pero Holiday consiguió recuperar el rebote.
Con solo 2,1 segundos de posesión para Milwaukee, Holiday sirvió desde la línea de fondo para el pívot Brook Lopez que, en lugar de lanzar, trató de asistir a Middleton, pero se le agotó el tiempo.
El error de los Bucks dejaba 6 segundos para una última jugada a Durant, que clavó un inverosímil lanzamiento sobre la misma línea de tres a la media vuelta para enviar el partido a la prórroga (109-109) en medio de la explosión de júbilo de la afición de los Nets.
Por centímetros, el tiro de Durant no fue un triple que hubiera dado la victoria a los Nets.
Con ambos equipos extremadamente nerviosos y cansados, el tiempo extra fue una colección de errores en la que los Bucks lograron volver a llegar al último minuto en ventaja y, esta vez, Durant no pudo obrar otro milagro.
“No sé qué más podía hacer Kevin, lo que hizo no es de este mundo”, le reconoció su entrenador, Steve Nash.