La prensa española y británica ya habían avanzado el domingo que las pruebas médicas del fin de semana habían sido positivas y que Alonso había sido autorizado a viajar a Kuala Lumpur.
La última formalidad es un examen médico de 45 minutos en el circuito de Sepang por el doctor Jean-Charles Piette, delegado médico permanente de la FIA.
“McLaren-Honda se complace en anunciar que, con la reserva de que supere con éxito un examen médico de la FIA este jueves 26 de marzo en Sepang, Fernando Alonso estará al volante de su MP4-30 este fin de semana en el Gran Premio de Malasia”, declaró la escudería.
Alonso estaba esta semana en Woking, la sede de la escudería McLaren-Honda, y pasó gran parte de la jornada del miércoles en el simulador del equipo.
El piloto español, de 33 años, había sufrido un accidente el 22 de febrero en el circuito de Montmeló, en una sesión de ensayos de pretemporada. Desde entonces ha estado recuperándose, con su familia en Oviedo y luego vio el Gran Premio de Australia (15 de marzo) en Dubái, antes de volver a Inglaterra.