Vettel ganó en 2009, por delante de su compañero australiano Mark Webber y del inglés Jenson Button -ya campeón, con un Brawn-, el estreno en el calendario de la capital de los Emiratos Árabes Unidos, que cerró aquel Mundial; un año antes de repetir victoria en el circuito de Yas Marina y convertirse en el más joven campeón del mundo, con 23 años y 134 días. El alemán firmó entonces el primero de sus cuatro títulos seguidos con Red Bull tras arrebatarle el liderato en la última carrera a Alonso.
Por su parte, Hamilton ganó la ya tradicional carrera que empieza de día y acaba con luz artificial (en Abu Dabi hay tres horas más que en el centro de Europa; y se mantienen los horarios 'habituales'), por delante del brasileño Felipe Massa y del finlandés Valtteri Bottas. Y capturó en la prueba de 2014 su segundo título, después del que había logrado en 2008 con McLaren.
Un año después, el excéntrico y espectacular campeón inglés ya llegó matemáticamente ganador del certamen a Abu Dabi, donde secundó la victoria de su compañero Rosberg. Que la temporada pasada festejaría, sólo cinco días antes de anunciar su retirada, la consecución del título mundial en Yas Marina. Donde le bastó acabar segundo. Por detrás de Hamilton.
En esta ocasión, con el título decidido a favor de Hamilton desde el pasado Gran Premio de México, en los Emiratos sólo está en juego el segundo puesto del campeonato, que acabaría en manos del finés Valtteri Bottas (Mercedes) en caso de un auténtico descalabro de Vettel. En la novena edición del Gran Premio de Abu Dabi.