Una veintena de pilotos de diez escuderías recorrerán el circuito urbano de 2,46 kilómetros de longitud por el centro de la ciudad en sus monoplazas con motor eléctrico.
El sueco Felix Rosenqvist (Mahindra Racing) lidera el campeonato con dos triunfos en las tres carreras disputadas hasta el momento: la que obtuvo en Hong Kong en diciembre pasado y la de Marraquech (Marruecos) el mes pasado.
Entre los pilotos que participan en esta especialidad destacan algunos nombres por su paso por la Fórmula 1. Es el caso del brasileño Nelson Piquet, el suizo Sebastien Buemi y el alemán Nick Heidfeld.
El circuito chileno recorrerá la zona del Parque Forestal, el río Mapocho y la Plaza Italia, uno de los puntos neurálgicos de la capital.
El director general de la Fórmula E, el español Alejandro Agag, explicó hoy que la competición echó a andar en 2014 con el objetivo de “promover el auto eléctrico”.
“Esto se puede hacer de varias maneras, y una es organizando estas carreras en medio de las ciudades para que la gente tenga una experiencia más cercana del auto eléctrico”, dijo Agag durante un foro organizado por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) en la víspera de la carrera.
Agag destacó que la Fórmula 1 ha servido para desarrollar avances tecnológicos que luego se han aplicado a los automóviles de uso cotidiano, como la aparición del espejo retrovisor.
Ahora aspira a que suceda lo mismo con la Fórmula E en ámbitos como la duración de las baterías eléctricas.
“En tan solo cuatro temporadas habremos doblado la capacidad de las baterías de estos autos eléctricos gracias a la motivación que viene de la competición, de querer ganar todos los equipos”, afirmó.
Hasta el momento, la carrera ha generado poca expectación en el público chileno, que ha estado más pendiente de los cortes de tránsito que se han llevado a cabo para preparar el circuito.