Las arañas habrían sido transportadas desde Perú por una pareja de nacionalidad alemana, que también tenía en su poder escarabajos, grillos y saltamontes.
La pareja había introducido los animales en cajas de plástico que llevaban escondidas en las maletas entre su ropa, según han explicado en un comunicado las autoridades aduaneras holandesas.
Varias de las tarántulas, que han sido puestas en manos de la Autoridad Holandesa de Seguridad Alimentaria y de los Consumidores, pertenecerían a variedades poco comunes.
Las autoridades han confiscado a los insectos y no se conoce por ahora si la pareja puede enfrentarse a cargos de algún tipo.