Marchionne acaba de firmar un gran contrato en la materia con Alphabet, la casa matriz de Google.
El vehículo autónomo “tiene una formidable utilidad en la vida real, no es una simple promesa. La cosa es real, y está llegando”, comentó.
“La gente habla de veinte años, yo pienso que se estará en eso en los próximos cinco años”, dijo Marchionne a la prensa durante el lanzamiento de la producción del monoplaza Chrysler Pacifica en la fábrica de Windsor, ciudad canadiense ubicada justo enfrente de la estadounidense Detroit.
Alphabet anunció el martes que encargó un centenar de ejemplares del Pacifica con el fin de más que duplicar la flota empleada para realizar las pruebas de su proyecto de vehículo sin conductor Google Car.
Los ingenieros de FCA colaborarán con sus colegas de Alphabet para concebir una versión del monoplaza especialmente adaptada para integrar computadoras a cargadas con programas de manejo autónomo del gigante de Internet en los que los sensores permiten al vehículo “ver” todo lo que sucede a su alrededor.
Marchionne no quiso ahondar en los detalles financieros, limitándose a informar que la asociación tendrá por el momento un alcance limitado.
Varios grandes grupos del sector automotor están trabajando en su propio proyecto de vehículo sin conductor, compitiendo con actores del sector tecnológico.