Ambos fabricantes de electrónica presentaron importantes pérdidas durante el ejercicio fiscal 2011, que en Japón concluyó el pasado 31 de marzo, un año en el que sus divisiones de desarrollo de televisores se han visto afectadas por la caída en los precios y la demanda.
Panasonic presentó una pérdida neta récord de 772.172 millones de yenes (7.539 millones de euros) , mientras que Sony perdió 456.700 millones de yenes (4.458 millones de euros) en lo que supone su cuarto ejercicio consecutivo en números rojos.
En el caso de Sony, cuyos portavoces declinaron confirmar la existencia del acuerdo, dicho plan estaría en línea con la estrategia presentada por su nuevo presidente, Kazuo Hirai.
Entre los objetivos expuestos por Hirai está el reducir en un 60 por ciento los costes fijos de la división de televisores, en pérdidas desde hace siete años, así como sus costes operativos en un 30 por ciento.
Medios japoneses ya informaron en abril de que Sony negocia con la taiwanesa AU Optronics, que produce esta tecnología a precios muy competitivos, un acuerdo para el desarrollo conjunto de monitores de diodos orgánicos emisores de luz (OLED) que aligeraría la carga de la empresa nipona en cuanto a inversión.
Por su parte, Panasonic, que hasta ahora no ha entrado en el mercado de paneles OLED, se encuentra sumido en un proceso de reforma estructural a medio plazo que persigue un modelo más enfocado al mercado global y a abrir nuevas ramas de negocio.
Un acuerdo entre Sony y Panasonic podría ayudar además a que la industria japonesa no pierda la estela de fabricantes como surcoreanos Samsunng Electronics o LG Electronics, que lideran el mercado y desarrollan con éxito monitores OLED de 55 pulgadas, con mayor definición y menor consumo.