“La prueba, llevada a cabo en el laboratorio del profesor Nicolas Gisin, es una primicia y simplemente pulveriza el anterior récord de seis kilómetros establecido hace diez años por el mismo equipo de la Universidad de Génova (UNIGE)”, indica la institución en un comunicado.
Popularizada por la ciencia ficción, en particular la popular serie Star Trek, la teleportación cuántica no permite, al menos en el estado actual del conocimiento científico, transferir objetos usuales y mucho menos seres vivientes.
Pero esta técnica debería desembocar en el futuro en aplicaciones interesantes, especialmente en el campo de las telecomunicaciones y del encriptado en internet, según los expertos, que estiman que un día la teleportación cuántica permitirá garantizar que una información enviada por un emisor a un receptor llegue a su destino sin ser interceptada.
En la experiencia realizada en la UNIGE, los físicos tomaron dos fotones provenientes de una misma fuente.
Uno de los fotones fue propulsado a lo largo de una fibra óptica y el otro fue enviado a un cristal, una suerte de dispositivo de almacenamiento de la información del fotón. El primer fotón, en la fibra óptica y a 25 km de su ’gemelo’, fue impactado luego por un tercer fotón.
Los científicos constataron así que la información contenida en el tercer fotón logró abrirse camino en el seno del cristal sin que los dos fotones hermanos se contactaran directamente.