Fu Long, que ahora vive en China, nació el 23 de agosto de 2007 en este mismo zoo. Los cachorros, que siguen siendo ciegos y sin oír hasta pasadas unas 5 ó 6 semanas de vida, hacen sus primeros movimientos “sobre el vientre de la madre”, comienzan a estirarse y “extienden sus pequeñas patas en el aire”, explica el zoo en un comunicado.
Ya se empiezan a apreciarse las marcas características de los osos panda en los pequeños, de los que aún se desconoce su sexo. Si bien todavía las orejas, la circunferencia que rodea sus ojos y sus extremidades no son completamente negras, el pelo de los pequeños oseznos en estas partes del cuerpo han adquirido un tono gris que destaca por encima del color que rosa que cubría todo su cuerpo en sus primeros días.
Además de Fu Long, las pequeñas crías tienen otros dos hermanos en China, Fu Hu (2010) y Fu Bao (2013), también nacidos en Viena. La página web del zoo actualiza a diario el desarrollo de las crías, que todavía no tienen nombre, mientras que en Youtube emite a diario un pequeño vídeo sobre los pandas. Hasta dentro de unos cuatro meses, las crías no saldrán a la zona accesible para los visitantes.