La investigación publicada en la revista del Instituto Nacional del Cáncer estadounidense señala que existe un 71% más de riesgo de contraer un cáncer agudo entre los hombres que consumen pescado graso o un suplemento de aceite de pescado.
“Hemos demostrado una vez más que el uso de suplementos nutricionales puede ser perjudicial”, dijo Alan Kristal, investigador del Centro Fred Hutchinson de Investigación del Cáncer y autor principal del artículo.
Los científicos todavía están desconcertados con la relación entre los omega-3 y el cáncer, pero todo indica que hay una relación en la formación de tumores.
El mismo equipo de investigadores publicó hallazgos similares en 2011, cuando relacionó las altas concentraciones sanguíneas del ácido con uno de los tipos de cáncer de próstata más graves.
Un gran estudio europeo también había señalado la relación entre el omega-3 y la enfermedad.
“Las recomendaciones para aumentar la ingesta de ácidos de cadena larga omega-3, los ácidos grasos, en particular, a través de suplementos, debe tener en cuenta sus riesgos potenciales”, dijo el estudio, poniendo de nuevo en el tapete el debate sobre la fiabilidad de los suplementos nutricionales.