El número de especies salvajes del norte canadiense consideradas en peligro alcanza ahora las 62, indicó el Comité sobre la situación de especies en peligro en Canadá (Cosepac) tras su reunión bianual.
“En el curso de las ultimas décadas, las áreas habitadas por algunos miles de morsas del Alto-Ártico y por la población más numerosa del centro del Ártico y del Bajo-Ártico han sido objeto de una reducción que continúa hasta hoy”, indicó el Cosepac.
El Comité recomienda que estas dos poblaciones sean clasificadas bajo el estatuto especie “preocupante” habida cuenta de las amenazas que pesan sobre ellas: calentamiento climático, retroceso de los hielos del mar, interacciones cada vez mas frecuentes con los turistas y desarrollo industrial. Dicho estatuto obligaría al gobierno a adoptar medidas para contrarrestar la reducción de las manadas.
El Comité también examinó por primera vez la suerte del caribú migrador del este, “célebre rebaño” de la ribera George en Québec y en Labrador que contaba con más de 800.000 cabezas en 1993 y de la que no quedan más que “algunos miles de animales”.
El estatuto de especie “en vía de desaparición” fue recomendado para esta especie de reno, así como por una segunda manada que también experimenta “un grave declive”, según la Cosepac.